La causa de la definitiva integración racial ha culminado su primera fase y esa parece ser la razón real tras la cadena de sucesos ocurridos en nuestro país en los últimos dos años. Trayvon Martín fue ultimado por el vigilante voluntario George Zimmermann y luego de un juicio sujeto a enorme presión popular el acusado es encontrado no culpable.
Michael Brown es ultimado en Furguson por un policía blanco; se corren todo tipo de rumores sobre la inocencia del difunto y se espera una dura condena al agente policial, pero las autoridades deciden no proceder por no encontrar los elementos necesarios para presentar un caso que tuviese posibilidades de victoria. La narrativa de los brazos en alto de la víctima y su grito de "no disparen" son categóricamente desmentidas por las evidencias forensicas.
Un señor que se dedicaba a la ilegal actividad de vender cigarrillos al menudeo en plena vía pública muere cuando un policía le aplica la llave para reducirlo a la obediencia; esto sucede a pesar de las mas de diez veces que la víctima advirtiese que no podía respirar.
Hace semanas en Baltimore un joven negro es detenido y muere mientras lo transportaban varios policías en un furgón; se especula una muerte a manos de los agentes aunque aún el caso se encuentra en sus primeros momentos.
Por una lado los habituales mercantes de la queja como Al Sharpton y Jesse Jackson así como muchos "liberals" blancos que devengan su salario a partir de la presunta defensa de la causa de la comunidad afroamericana atizan la llama racial con irresponsable obstinación; por el otro existe el sector que plantea que el problema más que racial es de divorcio entre gobernantes y gobernados, que la policía más allá de razas y demográficos actúa con excesiva energía contra quien no lo merece mientras se muestra incapaz de controlar el verdadero delito. La alcaldesa de Baltimore, el jefe de la policía y la fiscal del distrito son negros; tres de los seis policías que transportaban a Freddie Gray (la víctima en cuestión) son negros e incluso uno es mujer.
Lo más increíble de toda esta tragedia es que muchos políticos demócratas incluyendo al actual presidente, culpan la falta de oportunidades y la pobreza por el clima que conduce a la desproporcionada delincuencia en el demográfico afroamericano, pero soslayan que a esta ciudad se han dedicado miles de millones de dólares que su partido ha manejado y que parecen haberse esfumado pues el problema que debían enfrentar es hoy más grave que antes.
El racismo como fenómeno estructural caracterizado por un cuerpo de leyes; reglas y mecanismos creados por un grupo para impedir el acceso al poder y la riqueza de otro fue eliminado en Estados Unidos de un plumazo durante la administración de LBJ gracias a la tenacidad de miles de luchadores de todas las razas a la cabeza de los cuales marchaba el doctor King; significa esto que no subsistan prejuicios, manifestaciones, estereotipos y preconceptos en muchas personas e instituciones?, sería ingenuo pensar que si, pero resulta imperativo hacer una neta diferenciación entre racismo y segregación como pilares de la legalidad de nuestra sociedad y los lamentables y vergonzosos prejuicios que determinados individuos puedan conservar y que puedan incluso incidir a nivel estructural en instituciones y agencias, recordemos que las mismas son en última instancia manejadas por seres humanos. Hay no pocas iniciativas que la sociedad civil puede tomar ahora mismo y que en muchos casos no implican costo económico alguno para aplicar desde ya la segunda velocidad a la lucha por la integración racial. La primera velocidad ya aporto todo lo que podía dar y hay que ajustar la visión al reto que las nuevas tecnologías y el drástico cambio en las relaciones de producción de un sistema post industrial plantean.
Michael Brown es ultimado en Furguson por un policía blanco; se corren todo tipo de rumores sobre la inocencia del difunto y se espera una dura condena al agente policial, pero las autoridades deciden no proceder por no encontrar los elementos necesarios para presentar un caso que tuviese posibilidades de victoria. La narrativa de los brazos en alto de la víctima y su grito de "no disparen" son categóricamente desmentidas por las evidencias forensicas.
Un señor que se dedicaba a la ilegal actividad de vender cigarrillos al menudeo en plena vía pública muere cuando un policía le aplica la llave para reducirlo a la obediencia; esto sucede a pesar de las mas de diez veces que la víctima advirtiese que no podía respirar.
Hace semanas en Baltimore un joven negro es detenido y muere mientras lo transportaban varios policías en un furgón; se especula una muerte a manos de los agentes aunque aún el caso se encuentra en sus primeros momentos.
Por una lado los habituales mercantes de la queja como Al Sharpton y Jesse Jackson así como muchos "liberals" blancos que devengan su salario a partir de la presunta defensa de la causa de la comunidad afroamericana atizan la llama racial con irresponsable obstinación; por el otro existe el sector que plantea que el problema más que racial es de divorcio entre gobernantes y gobernados, que la policía más allá de razas y demográficos actúa con excesiva energía contra quien no lo merece mientras se muestra incapaz de controlar el verdadero delito. La alcaldesa de Baltimore, el jefe de la policía y la fiscal del distrito son negros; tres de los seis policías que transportaban a Freddie Gray (la víctima en cuestión) son negros e incluso uno es mujer.
Lo más increíble de toda esta tragedia es que muchos políticos demócratas incluyendo al actual presidente, culpan la falta de oportunidades y la pobreza por el clima que conduce a la desproporcionada delincuencia en el demográfico afroamericano, pero soslayan que a esta ciudad se han dedicado miles de millones de dólares que su partido ha manejado y que parecen haberse esfumado pues el problema que debían enfrentar es hoy más grave que antes.
El racismo como fenómeno estructural caracterizado por un cuerpo de leyes; reglas y mecanismos creados por un grupo para impedir el acceso al poder y la riqueza de otro fue eliminado en Estados Unidos de un plumazo durante la administración de LBJ gracias a la tenacidad de miles de luchadores de todas las razas a la cabeza de los cuales marchaba el doctor King; significa esto que no subsistan prejuicios, manifestaciones, estereotipos y preconceptos en muchas personas e instituciones?, sería ingenuo pensar que si, pero resulta imperativo hacer una neta diferenciación entre racismo y segregación como pilares de la legalidad de nuestra sociedad y los lamentables y vergonzosos prejuicios que determinados individuos puedan conservar y que puedan incluso incidir a nivel estructural en instituciones y agencias, recordemos que las mismas son en última instancia manejadas por seres humanos. Hay no pocas iniciativas que la sociedad civil puede tomar ahora mismo y que en muchos casos no implican costo económico alguno para aplicar desde ya la segunda velocidad a la lucha por la integración racial. La primera velocidad ya aporto todo lo que podía dar y hay que ajustar la visión al reto que las nuevas tecnologías y el drástico cambio en las relaciones de producción de un sistema post industrial plantean.