Habria miles de razones para considerar que el envio de la carta al presidente por parte de 40 personalidades sea un hecho no solo desafortunado sino inconsecuente. Mas que eso, significa el resignado reconocimiento al caracter de rehen del pueblo cubano y a la confesada inhabilidad para salir del vacio en que caimos hace mas de 50 anos; para no desperdiciar espacio ni abusar de la paciencia del lector senalo dos de esas razones:
1- El capital puede equivocarse y de hecho se equivoca con lamentable frecuencia; posiblemente reincida con tamana tozudez porque le es facil encarar sus errores; unos pocos millones por aca, otros millones por alla, perdidas nada agradables y no deseadas pero materiales y saldables al fin y al cabo. Cuando yo me equivoco pago con anos de Gulag y oscuridad eterna mientras para el capital el precio del error es una precipitada expedicion en yate, a veces hasta en yet privado, asi como algunas que otras veloces transferencias bancarias y cierres anticipados de cuentas.
2- Soy consciente de que no todo y no siempre es dinero y riqueza; existe el componente emocional en especial cuando se llega a determinado punto de nuestras vidas. Cuba nos envuelve, siempre lo hizo, el embrujo de sus tardes soleadas, la cadencia de anejas tonadas cargadas de nostalgia ajena y amores eternos; las callejuelas de La Habana Vieja aun reverberantes de pregones picarescos de otras epocas, la vida entera de millones de seres gritada de balcon a balcon, las sabanas blancas (todo lo blancas que la precaria quimica del regimen permite) revoloteando a merced del denso y sofocante viento marino. Todo esto hace que mas alla del entorno real la fantasia una y otra vez nos haga rehenes y nos provoque la irresistible tentacion de regresar siempre una vez mas. En la euforia que provoca esta kermesse sensitiva tendemos inevitablemente a desentendernos del como y el porque. Pero no nos llamemos a engano: cuando el delicioso mojito ha dejado de turbar nuestros sentidos, la timba de resonar en nuestros oidos y el humo de aromatico Cohiba ha dado paso al fresco de la incipiente manana queda solo el video realizado de forma furtiva, las posiciones inexplicables, las manipulaciones secreteadas en oscuras oficinas, los pasos de prisa sobre corredores en penumbras y la triste y tardia comprension de nuestra inexorable vulnerabilidad occidental y perfumada.
1- El capital puede equivocarse y de hecho se equivoca con lamentable frecuencia; posiblemente reincida con tamana tozudez porque le es facil encarar sus errores; unos pocos millones por aca, otros millones por alla, perdidas nada agradables y no deseadas pero materiales y saldables al fin y al cabo. Cuando yo me equivoco pago con anos de Gulag y oscuridad eterna mientras para el capital el precio del error es una precipitada expedicion en yate, a veces hasta en yet privado, asi como algunas que otras veloces transferencias bancarias y cierres anticipados de cuentas.
2- Soy consciente de que no todo y no siempre es dinero y riqueza; existe el componente emocional en especial cuando se llega a determinado punto de nuestras vidas. Cuba nos envuelve, siempre lo hizo, el embrujo de sus tardes soleadas, la cadencia de anejas tonadas cargadas de nostalgia ajena y amores eternos; las callejuelas de La Habana Vieja aun reverberantes de pregones picarescos de otras epocas, la vida entera de millones de seres gritada de balcon a balcon, las sabanas blancas (todo lo blancas que la precaria quimica del regimen permite) revoloteando a merced del denso y sofocante viento marino. Todo esto hace que mas alla del entorno real la fantasia una y otra vez nos haga rehenes y nos provoque la irresistible tentacion de regresar siempre una vez mas. En la euforia que provoca esta kermesse sensitiva tendemos inevitablemente a desentendernos del como y el porque. Pero no nos llamemos a engano: cuando el delicioso mojito ha dejado de turbar nuestros sentidos, la timba de resonar en nuestros oidos y el humo de aromatico Cohiba ha dado paso al fresco de la incipiente manana queda solo el video realizado de forma furtiva, las posiciones inexplicables, las manipulaciones secreteadas en oscuras oficinas, los pasos de prisa sobre corredores en penumbras y la triste y tardia comprension de nuestra inexorable vulnerabilidad occidental y perfumada.
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