jueves, 26 de abril de 2012

A PROPOSITO DE IGUALDAD DE CONDICIONES

Por meses he venido reiterando el criterio de que sin mendigar solidaridad de nadie los cubanos de aqui y de alla debemos obtener los derechos que nos pertenecen como seres humanos; ahora de nuevo el regimen de La Habana, a traves del senor Alarcon, desempolva el viejo trozo de zanahoria que es la reforma migratoria; muchos decimos que lo creeremos cuando lo veremos, pero la esperanza es lo ultimo que se pierde. Ya veremos.

Ahora abordare un tema que ha sido sospechosamente soslayado por los medios e incluso por tantos de nosotros; se trata de los viajes a Cuba. Cuando hablo de viajes a Cuba me refiero al mecanismo que se oculta tras el compatriota que sale en un avion, llega a La Habana o a otra ciudad cubana y es recibido con una "recuperada" efusividad por sus parientes. Deseo senalar el monopolio que existe e impide que cualquiera pueda crear una empresa para chartear vuelos a la isla. Creo que el numero de estas companias es siete y se que obtener permisos para aterrizar en Cuba desde territorio americano es poco menos que imposible.

Siguiendo la logica anterior y conociendo como funcionan las cosas en nuestro pais de origen no cabria la menor duda de que los charteros deben pagar "peaje" por el permiso que detentan y que esta dinamica en la gestion de los viajes a esa nacion van en direccion diametralmente opuesta a la logica, la filosofia y la ley de Estados Unidos de America. Si usted decide abrir una empresa para chartear aviones hacia cualquier destino es evidente que debe contar con ciertos permisos y cumplir ciertos requisitos, pero NO se ve obligado a "comulgar" con el gobierno de la nacion donde se encuentre el destino seleccionado ni mucho menos a covertirse en persona de influencia o agente a favor de la misma y en detrimento de su propio pais (natural o adoptivo que sea). Para chartear aviones entre USA y Cancun, por ejemplo, ademas de cumplir con las reglas corporativas americanas y pagar los necesarios seguros, se solicita la autorizacion de la aeronatica civil mexicana, lo unico que este ente estudia es las caracteristicas tecnicas y trayectoria en termimos de seguridad aerea de la empresa asi como, en algunos casos, el record tecnico de los equipos que seran usados; excepcionalmente pudieran solicitar el record de los pilotos que operaran los aviones y su numero de horas de vuelo. Por ultimo, la institucion verifica que el equipo que volara sea americano o mexicano, es decir: matriculada en el pais de origen o en el de destino, por algo que en este negocio se llama "quinta libertad"; si el aparato no es de ninguno de los dos paises debe contar con la autorizacion de una aerolinea americana o mexicana que le de su "numero"; de ahi en lo adelante no se necesita mas nada. Lo se porque participe en la negociacion de charters italianos a Mexico, Republica Dominicana e incluso Cuba, a principio de los noventa.

En el caso de Cubita la Bella la cosa cambia, como siempre, ellos se reservan el derecho de autorizar los vuelos no solo por motivaciones tecnicas sino, en particular por razones de indole politico ideologico; mientras aqui hay quien habla de intercambio cultural y recibimos a brazos abiertos a cuanto artista llegue del vecino pais, el regimen de Castro impide que estrellas como Gloria Estefan actuen en Cuba; mientras la administracion Obama relajo en cierta medida algunas restricciones para que los nacidos en Cuba viajaran a su pais; este, por via de sus dirigentes, monopoliza, dicta quien puede y quien no puede ganar dinero (en tierra americana) y condiciona el entero panorama del cacareado "reencuentro" de familias; es hora que Washington, en ejercicio de su soberania, obtenga la apertura de este absurdo monopolio, pero por sobre todas las cosas es hora que nosotros, los cubanos, denunciemos esta manera mafiosa del gobierno de la isla de privilegiar a sus simpatizantes en detrimento del sacrosanto libre mercado

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