miércoles, 14 de marzo de 2012

PERDONANDO LAS ABISMALES DIFERENCIAS

Acabo de escuchar al vocero del Departamento de Defensa opinar sobre la real situacion de nuestras tropas en Afganistan; sin pasar por alto las enormes diferencias que existen entre la vida que llevabamos en Cuba en los anos setenta y la que por suerte llevamos ahora en tierra de libertad, me parecia estar escuchando a alguno de los voceros del regimen cuando hablaba de la situacion en la Angola de entonces. Se nos decia que no obstante las innegables dificultades Cuba emergeria vencedora y que a la larga el pueblo angolano seria libre y el colonialismo perderia su terreno para dar lugar a una sociedad marxista mucho mas justa.
El vocero del Departamento de Defensa me aturdio con una perorata muy similar: "hay que ver las cosas en contexto, hemos avanzado mucho, la cooperacion con el gobierno de Karzhai es optima y proficua.." y bla, bla, bla...

En el caso de Angola, mas alla de los cientos de cadaveres cubanos en flor de vida no cambio nada o casi nada; en lugar de una oligarquia portugesa racista y explotadora hoy reina una elite angolana, con la presencia de algunos extranjeros y cubanos "quedados", igualmente racista, solo que en sentido contrario y tanto o mas explotadora que la anterior; para el pobre diablo de a pie en esa nacion africana que lo atropelle un portugues o que lo haga un angolano no debe significar cambio alguno, el continua viviendo una miserable vida sin esperanzas.

Afganistan esta hoy gobernada por una casta de delincuentes, oportunistas que no tiene en cuenta los intereses del pueblo sino los suyos y de sus acolitos. El discurso de los politicos, esos parasitos que mantenemos con nuestro sudor y que nos desprecian con un ancestral sentido de la trascendencia, entonces y ahora es el mismo: ocultar errores, superficialidad en el juicio y falta de puntualidad a la hora de terminar los compromisos; nuestros compatriotas regresaron a Cuba para encontrar que tendrian una vida mas dura aun de la que tenian los demas; nuestros soldados, en muchos casos, terminan mutilados, olvidados y tema de mofa que solo se hace seria cuando alguno de estos parasitos que mencionaba antes desea ganar una eleccion; entonces los visita, se hace un par de fotos conmovedoras con ellos, promete milagros y luego se marcha sin mirar atras y sin jamas recordar al infeliz que le sirvio de alfombra humana en su camino hacia el poder.

En toda honestidad, hay contrastantes diferencias: aqui yo puedo escribir esto y colocarlo en mi blog sin temer que me vangan a buscar en plena madruigada para llevarme a Villa Marista. Puedo escupir mi irreverente criterio sin sufrir la dolorosa represalia de un regimen ofendido, pero a fin de cuentas la manipulacion y falta de seriedad de los que se supone nos guien hacia aguas mas tranquilas es en extremo preocupante y las situaciones muestran similitudes demasiado peligrosas

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